En estos momentos en donde el estrés aumenta y nuestro estómago empieza a sentir los estragos de la mala alimentación y padecemos de acidez, agruras y malestares estomacales, es recomendable hacer una dieta de caldo de hueso por unos días para reparar nuestro intestino y darle soporte a nuestro sistema inmune.
Algunos beneficios que nos trae este caldo son:
– Contiene gelatina (colágeno e hidratación)
– Ayuda a la sana digestión
– Alto en proteína
– Contiene minerales que el cuerpo absorbe fácilmente
– Contiene amino ácidos que refuerzan los tejidos (celulitis)
– Es muy económico.
Te comparto una receta del Taller de Raquel Guajardo.
Ingredientes
CALDOS DE HUESO
2 – 3 kgs huesos (rodilla, tuétano, patitas) Agua filtrada
1/4 taza vino o vinagre
Cebolla
Apio Zanahoria Perejil
Modo de preparación
- Hornear, cocinar la carne con hueso o un pollo entero
- Comer la carne y guardar los huesos.
- En una olla, colocar los huesos.
- Si se desea obtener gelatina, agregar patitas de pollo o puerco.
- Agregar agua filtrada hasta tapar.
- Agregar un chorro de vino tinto o vinagre.
- Dejar reposar de 30 mins. a una hora.
- Agregar verduras.
- Hervir.
10. Espumar (Quitar la espuma con una cuchara).
11. Reducir fuego. Tapar.
12. Cocinar: corto – 3 a 5 hrs ó largo (12 a 72 hrs.)*
13. Añadir perejil una hora antes de terminar de cocinar. 14. Colar.
15. Dejar enfriar y refrigerar.
*Para quienes empiezan a tomar caldos de hueso o empiezan con la fase de introducción de GAPS, se recomienda cocinar corto tiempo. (3 a 5 horas).
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